sábado, 31 de mayo de 2008

"María se puso en camino y fue a toda prisa a la montaña"


Salir, al alba, romper el alba, albor, aurora, al camino, ponerse en camino, subir a la montaña, en la madrugada, al clarear el día, en marcha, ponerse en pie, al amanecer...

En la fiesta de la Visitación de María de Nazaret a su prima Isabel, expresiones como las anteriores afloran en mi mente. Expresiones frecuentes y conocidas por ser muy evangélicas, muy humanas. En mi tierra manchega oigo a los que van a iniciar un viaje cómo suelen decir:
"saldremos de madrugada" "hacia la madrugada nos pondremos en camino"

Don Miguel de Cervantes escribe: "Sería la del alba cuando don Quijote salió al camino". Sería dice con la incertidumbre propia del alba. Un alba que si centramos la mirada es un alborear. Algo va a aparecer y expectantes, admirados, esperamos sin contar el tiempo, sólo pendientes del acontecimiento. La luz empieza a rebosar y se desborda. Es el alba algo indecisa: sí, ya, aún no, ya viene, espera, todavía no.

Cuando era niña y pasaba algún tiempo veraniego en la "aldea" solía despertarme muy pronto pues quería "ver amanecer". Colocaba los codos en el poyo de la ventana y esperaba, esperaba. No sabía cuando sería ni el tiempo que duraría, sólo esperaba con los ojos bien abiertos para no perderme nada, con la mirada fija que de luz se llenaban.
María de Nazaret sale y se pone en camino para subir a la montaña. Y sale expectante, admirada, pendiente del acontecimiento que está por venir aunque sin saber con certeza lo que le espera. María es la persona que nos introduce en el Evangelio, en un mundo nuevo. Ella es el alborear, el amanecer de un mundo diferente. Un mundo donde Dios-Amor hace maravillas como lo ha hecho en ella. La Visitación de María a Isabel se situa en el momento justo en que las dos mujeres esperan la luz. En la noche del alma de todo un Pueblo, María e Isabel esperan su luz.

Don Alonso Quijano sale al camino...
Así tantos aventureros, "tocados por el Amor", se ponen en marcha, salen al camino. Al alba de una nueva vida, incierta, pero seguros en la Fuerza que los impulsa. Es lo más parecido a la vida de cada Ser Humano pues su propia vida, la de su ser en la Madre Tierra, está en alborada, alborea.

"Ante el alba, el Hombre se encuentra consigo y ante sí, en ese su ir a desbordarse e ir a ocultarse, en esa su indecisa libertad semisoñada, y ante el alba, la suya, la del día, se despierta yendo a su encuentro. Es su primaria, su primera y trascendental acción".
María Zambrano (Algunos lugares de la poesía)

Comprenderán el nombre de este blog "Al rayar el alba". Lugar donde una se sitúa. Como aquellas mujeres del Evangelio que "Al rayar el alba, al clarear el día" se encaminan al sepulcro y descubren al resucitado, vivo al que estaba muerto. Así una; la vida, en la raya del alba, cuando las tinieblas se disipan y la raya del horizonte, claridad incierta. Así la vida de tantas mujeres y tantos varones.
Al alba, salgamos al camino para encontrarnos con el otr@ que llegará a ser el Herman@ y nuestras obras de Amor hablarán por nosotr@s como hablan de María de Nazaret. Al alba de nuestra vida Dios-Amor hace maravillas en nosotros.





lunes, 19 de mayo de 2008

Misterio de la Santísima Trinidad. Belleza y esplendor de la Creación, de la Humanidad


En clase de Religión, preparando la fiesta de la Santísima Trinidad y después de haberse celebrado, al preguntar al alumnado por el significado de la Santísima Trinidad: si conocían la fiesta, qué podían hablarme sobre ella... No supieron decirme casi nada. La mayoría ni habían oído las palabras, otros de "una fiesta de la Iglesia" no pasaron. La pregunta iba dirigida al alumnado de Primero de Bachillerato, algunos de entre ellos habían recibido el Sacramento de la Confirmación. Sólo me encontré con dos alumnas que pudieron decirme: el Padre, el Hijo, el Espíritu Santo, nada más, incapaces de expresar otras palabras y mucho menos lo que podrían sugerirles. Con un poco de ayuda expresaron la palabra Dios. No crean ustedes que los entendidos te dicen algo más. En la Eucaristía correspondiente, en la Homilía, el sacerdote no pasó de decir que es un Misterio y no debemos esforzarnos por comprenderlo, sólo creerlo. Se nos sigue tratando como a personas incapaces de escuchar, de querer saber o de amar pues en este caso es lo que corresponde. Una se pregunta ¿Cómo creerlo si no sé, si no conozco nada? ¿Cómo amarlo si se me oculta? A los cristianos se nos ha acostumbrado durante tantos siglos a decirnos que es un Misterio, que no podemos entenderlo y lo típico y socorrido de San Agustín. Creo que desde San Agustín ha llovido mucho, por otro lado, los teólogos y otros entendidos no escatiman palabras, libros y más libros para explicar algo que sólo se puede hacer desde el amor.

Cuando utilizamos la palabra Misterio estamos cerrando el entendimiento, poniendo murallas para comprender. La palabra Misterio tiene muchas formas de abordarlo: Amor, Asombro, Admiración, Perplejidad, Belleza, Grandiosidad, Universalidad, Esplendor... Es desde estas palabras como podemos abordar la Santísima Trinidad. Esplendor y Belleza de la Creación, de la Humanidad y todo lo que la rodea. Unidad del Ser Humano y su entorno. Armonía de la Creación. La gran familia de Dios -Amor en la gran casa del Universo.

PENTECOSTÉS, "Envío del Espíritu Santo"



Pentecostés. Jean Restout, 1732
Louvre (París)

En Pentecostés los cristianos celebramos el envío del Espíritu Santo. La pequeña Comunidad de Jerusalén, aquellos primeros seguidores del Maestro de Nazaret, fueron conscientes de la grandeza de Espíritu que los llenaba. Un fuego abrasador, fuerza y pasión, los lanzó a una aventura extraordinaria que dura más de dos mil años. Como sus antepasados, Abrán y Sara, también dejaron sus lugares de origen y formas tradicionales de pensar para avanzar y ser Universales. Aquel día todos los discípulos, hombres y mujeres recibieron el Espíritu de Amor, fuerza para cambiar la realidad por otra mejor, más avanzada, más justa, que traiga felicidad al Ser Humano. En medio de ellos, como la que prende la llama, una mujer: MARÍA DE NAZARET la gran enamorada que cree firmemente en el mensaje del Reino. Ella reune, auna e impulsa a todo el grupo. María de Nazaret, la Madre de Jesús, centro de la Comunidad de seguidores del Maestro en Jerusalén. María de Nazaret centro de la primera Iglesia. María de Nazaret Fundadora de una Iglesia que sigue el mensaje de Jesús, que quiere instaurar el Reino de los Cielos. Una Comunidad que quiere hacer presente, aquí y ahora, las promesas del Reino. El Amor, la Paz, la Compasión, la Justicia, la Misericordia, el Consuelo... de un Dios-Amor. Felicidad para hombres y mujeres, Salvación.

miércoles, 7 de mayo de 2008

Exámenes en las aulas



Durante un examen en las aulas de la Universidad.

La imaginación tiene alas.

Santa Teresa de Jesús, refiriéndose a la imaginación, la llama la "loca de la casa", siempre trabajando, siempre dispuesta a colaborar aunque sea con traviesos engaños.

Mientras el alumnado responde a las preguntas de un examen escrito, una "mira" y, esa mirada pone en marcha la imaginación, el pensamiento se desata y circula libremente. La "loca de la casa" inicia su trabajo.

Cada vez que preparo un examen quisiera no hacerlo difícil, que todo el alumnado pueda contestar sin dificultad. Cuando llegado el momento de la "verdad" entrego la hoja con las preguntas para que sean contestadas, deseo que la devolución sea de diez o como mínimo de ocho. Si no fuera así es una quien tendría que evaluarse y reflexionar donde ha fallado. El alumnado debe salir de clase con la lección aprendida, con las ideas claras sobre el tema que la profesora explica, con lo fundamental que una considera imprescindible y, lo más importante: despertar la curiosidad, el interés académico, abrir el deseo del conocimiento para querer saber más, descubrir algo nuevo. Más tarde, al llegar a casa, en las horas de estudio personal, se deberá ampliar los contenidos recibidos, investigar sobre lo que se ha dicho y, otras formas de abordar el tema explicado en clase, aportar su punto de genialidad. La profesora muestra el camino para ir a las estrellas, un viaje que transita y experimenta con frecuencia. El alumno llega y toca las estrellas, al tocarlas queda transformado. Las dos partes son necesarias; la de la profesora y la del alumno para llegar a buen puerto en el examen final.

Hoy ha tocado un artículo para reflexionar al leerlo. Cuando doy un articulo para su lectura, reflexión y que el alumnado exprese su opinión, suelo poner unas preguntas a modo de guía, la experiencia así me hace prepararlo, de otra forma, se ponen a escribir y se van por los "cerros de Úbeda", terminan hablando de temas variopintos. En otras ocasiones no aciertan a empezar, lo del centro es un bosque de enredaderas y el final, el final ni se sabe, perdidos. La capacidad de síntesis, de extraer lo fundamental y sacar conclusiones dignas de leer, suele costar bastante al alumnado de diferentes puntos de la geografía ibérica, parece ser un mal común. Las preguntas de guía: centran, son como abrir una ventan por donde mirar, puntos cardinales, la llave maestra para entrar en el texto. Después, todo viene rodado, la comprensión y análisis así como las conclusiones, me parece que se les hacen más fáciles.

Escribo esto durante un examen. Mirando los rostros de aplicados alumnos, hombres y mujeres, adivino que se lo saben todo. Los veo escribir con agilidad; no es difícil, han estudiado, está todo claro... Y después suspiro, una también se examina. Cada examen de ellos y ellas, también el mío.

"El Profesorado se examina cada día al término de la lección"